
La vitamina K no es tan conocida coma la vitamina C, la D o la A, pero es igual de importante. El déficit de esta puede ocasionar consecuencias en la salud, desde trastornos hemorrágicos a un desarrollo óseo deficiente y posibles riesgos cardiovasculares. Esta vitamina es esencial para la correcta coagulación de la sangre, la salud de los huesos, del corazón y la correcta asimilación de la vitamina D. Es muy importante saber que esta maravillosa vitamina puede interferir en varios alimentos, como los anticoagulantes.
¿PARA QUÉ SIRVE LA VITAMINA K?
Esta vitamina podemos dividirla en dos grupos:
- La vitamina K1, que se encuentra en las verduras de hoja verde.
- La vitamina K2, que se encuentra en alimentos de origen animal, alimentos fermentados y bacterias intestinales.
Las funciones son:
- La coagulación de la sangre.
- Fortalecer los huesos y prevenir las fracturas.
- Puede prevenir el Alzheimer.
- Combinada con la vitamina D, la vitamina K2 minimiza el riesgo detener niveles elevados de calcio en el organismo.
ALIMENTOS RICOS EN VITAMINA K
- Verduras de hoja verde como espinacas, acelgas, grelos o col rizada.
- Coliflor, brécol y coles de Bruselas.
- Aceites vegetales como el de oliva y el de soja.
- Alimentos fermentados como el chucrut, el kimchi y el kéfir.
- El nattō, plato japonés a base de soja fermentada, es una excelente fuente de vitamina K.
- Huevos.
- Mantequilla.
- Pechuga e hígados de pollo.
- Gorgonzola y otros quesos azules (que contienen moho).
- Arándanos.
- Higos.
¿POR QUÉ SE DEBE COMINAR LA VITAMINA D CON LA VITAMINA K?
Ambas son esenciales para los cuidados cardiovasculares y óseos. La vitamina K potencia los efectos de la vitamina D. Concretamente, la vitamina D sintetiza proteínas que solo se activan con la vitamina K, lo que hace que una sea indispensable para la otra. Sin la vitamina K, se corre el riesgo de que estas vitaminas no se activen y se acumulen.
¿CUÁNTA SE DEBE DE TOMAR?
Se recomienda consumir 90 mcg en mujeres y 120 mcg en hombres. Se recomienda tomarla después de alimentos con grasas para su mejor absorción.
¿QUIÉN DEBE TOMAR SUPLEMENTOS DE VITAMINA K?
- Personas con celiaquía y inflamación intestinal, ya que se les hace más difícil la absorción de esta vitamina.
- Las personas que están en tratamiento prolongado de antibióticos.
- Las personas con niveles inadecuados de protrombina, una proteína que interviene en la coagulación de la sangre.
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