Pieles grasas, mixtas, secas, tez apagada, acné, puntos negros, brillos, deshidratación, descamación… cada piel es mundo y requiere de un cuidado personalizado. Además, no todo el rostro tiene porque encontrarse en el mismo estado, podemos encontrar unas zonas con más brillo que otras, incluso en una piel grasa tener zonas deshidratadas ya que nuestra piel va variando según la época en la que se encuentre. Otros aspectos que afectan directamente a la piel son los cambios climáticos u hormonales.

¡Desde Thuya Escuela te traemos las claves para saber cuál es tu mascarilla ideal!

La tendencia del multimasking

Esta nueva tendencia nació en el mundo de la estética y pretende combinar mascarillas, para poder aportarle a cada zona del rostro lo que necesita dependiendo del estado en el que se encuentre, así ofrecemos a nuestra piel un cuidado mucho más completo, personalizado y eficaz, un ejemplo sería la cosmética negra.

Además, tenemos que ver la mascarilla como parte de un tratamiento, por lo que es importante saber que no es solo un cuidado básico, si no que podemos tratar un problema especifico en una zona específica.

Existen muchas mascarillas para el multimasking, desde purificantes, nutritivas, hidratantes, antioxidantes, oxigenantes, iluminadoras y hasta reafirmantes.

Algunas de las mascarillas aportan beneficios muy concretos al rostro.

mujer con diferentes mascarillas aplicadas en las diferentes partes del rostro

Zonas más recurrentes de aplicación

Esta técnica de estética se suele aplicar en tres zonas muy diferenciadas, la zona T (frente, nariz y mentón), contorno de ojos, mejillas y laterales, y esto tiene una explicación, pues la zona T contiene mayor número de glándulas seborreicas, por lo tanto presenta poros dilatados, puntos negros, descamación y enrojecimiento, mientras que en mejillas y laterales el rostro suele ser más seco, la piel más fina o engrosada por el sol y manchas solares y en el contorno de ojos, líneas de expresión y congestión.

Aunque expuesto así parece muy evidente la manera de aplicar estas mascarillas, no debemos pasar por alto la analítica de la piel, para poder encontrar los problemas que tiene y su estado, a partir de ahí, evaluar y decidir que tipo de mascarilla aplicaremos.

4 tipos de mascarillas

Dentro de estas combinaciones podemos encontrar:

  • 1. Mascarillas purificantes o limpiadoras: ideales para pieles grasas, reducen la producción de sebo, y limpian en profundidad los poros, contribuyendo a que reduzcan su tamaño, puede utilizarse siempre en la zona T cuando la notamos más sucia de los normal.
  • 2. Mascarillas iluminadoras o revitalizantes: ideales para pieles cansadas o si sientes que tu piel esta más apagada de lo normal, devuelven la luz al rostro para que se vea descansado y con aspecto sano; también pueden ser utilizadas previo a un evento o cita especial, tras días largos de trabajo o de mucha fiesta.
  • 3. Mascarillas hidratantes y nutritivas: son perfectas para pieles secas, normales o mixtas, cutis graso, deshidratado, descamado. Puedes aplicarla en las zonas donde el rostro necesite hidratación y suavidad. Es ideal para esos momentos donde notas la piel tirante.
  • 4. Mascarillas reafirmantes: ayudan a mejorar la condición de la piel para que luzca más joven, aportando elasticidad y firmeza. Son perfectas para pieles maduras y para cualquiera que necesite afinar líneas de expresión o prevenir la falta de firmeza. Es conveniente aplicarlas en el contorno de la boca y el ovalo del rostro.

¿Quieres ser un/a profesional del sector estética? ¡Fórmate en Thuya Escuela con nuestro CFGM en Estética y Belleza y alcanza tus sueños!